miércoles, 19 de diciembre de 2012

Sin palabras

una cama segura


I.



Por un camino de pavimento

Vienen corriendo tus ojos.


Mil pájaros vuelan en busca de una Flor

La Flor, que como un búfalo mana

De tu vientre acobardado.


Sordo queda el alquitrán de tanta primavera





II.



Empezar un café en la noche,

Vapor de la memoria, cura de los olvidos

Desde las sábanas, desde las piernas que se abrazan

Una cama segura,

Para no despertar en estas mañanas

sino en otras.



Era como si muriéramos en el mismo barco

Era la misma tormenta

Una boya flotando en el gris del río.


Triste vive la aventura, cuando es desposeída

Un despertar unánime

Sacude a los viajeros, víctimas del naufragio


Como a los versos que vuelan

Más allá de los rayos que incendian el horizonte

Hasta anclar en otro rellano desierto

Donde todas las horas transitan


por el carril del letargo




III.



En el monte salvaje de los aullidos

Los zumbidos de las impalpables presencias

Me esperan

Con sus ramas abiertas

Con sus palmeras de pie

Sombras ausentes,
cañas de azúcar 














No hay comentarios: