martes, 18 de junio de 2013

Sin Palabras

Tu cuerpo son mis mañanas
 todavía

Y eso supura

Hoy nada más lejos del sol
que tu modorra desfachatada

Otros cuerpos son mis noches,
pero no los conozco

(como no te conocí a vos,
antes de conocerte)

Qué vicio profundo:
la añoranza de lo imaginado

                              
                                 Hablar mucho no es conocerse

Es sólo apurar el amanecer.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

hablar mucho con las palbras no es conocerse, hablar con las miradas, con el tacto, con las convulsiones del cuerpo....

Esperanza Van Nooit dijo...

eso también puede ser no conocerse... sólo apurar el amanecer